martes, 6 de abril de 2010

El Genedis de la Ingeniería


La ingeniería se define como la profesión en la cual los conocimientos de las matemáticas y las ciencias naturales obtenidos a través del estudio, la experiencia y la práctica, son aplicados con criterio y en conciencia al desarrollo de medios para utilizar económicamente con responsabilidad social y basados en una ética profesional, los materiales y las fuerzas de la naturaleza para beneficio de la humanidad. Las personas que se dedican a ella reciben el nombre de ingenieros.

La ingeniería en México se observa desde la época de la colonia en aspectos como la agricultura, la minería y la producción. Posteriormente a finales del siglo XIX, surgen los primeros ingenios azucareros, el tabaco y la industria textil y la población empieza a concentrarse en ciudades en las que se requiere de más servicios y construcciones. Estos aspectos generan la participación de los ingenieros mexicanos en: el tendido de redes de ferrocarril; en la operación y el mantenimiento de los ferrocarriles; en la construcción de obras urbanas; en trabajos de agrimensura y topografía; y en la construcción de obras portuarias, hidráulicas y de vivienda.

A principios del siglo XX se formaliza la industria textil mexicana e inician su operación la siderurgia, la producción de energía eléctrica, el otorgamiento de servicio telefónico y la exportación de recursos petroleros. Estos ámbitos permitieron la participación incipiente de los ingenieros mexicanos, quienes fundamentalmente participaban en los campos del mantenimiento y la operación, poca era la participación permitida en el diseño de origen en las industrias. En los casos de la construcción, agrimensura y topografía los ingenieros mexicanos empezaron a ganar prestigio y en breve se convirtieron en grandes diseñadores y constructores.

Debido a las reformas agrarias, producto de los diez años de la revolución mexicana, se requirió de la participación de una gran cantidad de ingenieros agrónomos quienes se encargaron de la redistribución y reorganización de la tierra. También se requirió de la reparación de los ferrocarriles mexicanos, aspecto que demandó la participación de ingenieros civiles, mecánicos y topógrafos. Posteriormente las Comisiones Nacionales de Irrigación y de Caminos, las que permitieron la participación muy importante de muchos ingenieros civiles mexicanos.

En esa época, con los escasos profesores y técnicos existentes, se crearon las escuelas de Ciencias e Industrias Químicas, la de Ingenieros Mecánicos y Electricistas. Instituciones que sumadas a la Escuela de Ingeniería y Minas sirven de simiente a la formación de los ingenieros en México.

Posteriormente en los años treinta del siglo XX se fortaleció la actividad económica mexicana con lo que se fortalecieron las industrias de alimentos, bebidas, tabaco, textil, ropa, calzado, cuero, madera, imprenta, química, siderúrgica y petrolera, lo que ocasionó una gran demanda de ingenieros con gran especialización en diferentes campos.

Las políticas de Estado sobre el comercio y la industria fortalecieron la infraestructura productiva del país, con la consecuente participación de los empresarios. Esto generó gran diversificación industrial, crecimiento sostenido, diversificación industrial, e incremento de la producción en general. Aspectos que requirieron de gran cantidad de ingenieros especializados en diferentes campos, por lo que la infraestructura educativa del país en la ingeniería se fortaleció notablemente. Un ejemplo del crecimiento de las instituciones educativas es la fundación del Instituto Politécnico Nacional y muchas escuelas técnicas de capacitación para los hijos de los trabajadores de las empresas mexicanas.

Durante la Segunda Guerra Mundial, como en todo el mundo escasearon los abastos de materias primas y hubo un freno de la industria mexicana. En esa época se establecieron algunas fundidoras, acereras, vidrieras, empresas textiles y de alimentos. Estas empresas permitieron la participación de los ingenieros mexicanos en esa época de carencias. No obstante los grandes problemas económicos de la industrial mexicana los ingenieros siempre tuvieron la posibilidad de participar en la operación de la industria mexicana.

Durante estas fechas y hasta 1975, el motor del desarrollo en el país fue la industrialización, el desarrollo interno de las empresas por medio de estímulos al empleo y al consumo de los productos nacionales. La participación en esta política nacional de los ingenieros mexicanos fue crucial, toda vez que gracias a su intervención se logro construir una planta productiva que cubría las necesidades de consumo y empleo de un país en pleno desarrollo.

En la actualidad el desarrollo de la ingeniería mexicana se ha quedado obsoleto o se le ha permitido muy poca participación en las nuevas empresas que han llegado a nuestro país. El desarrollo de la investigación y las nuevas tecnologías se encuentran fuera del alcance de los ingenieros mexicanos y por lo tanto de los empresarios. El sistema gubernamental no invierte en la investigación y los recursos para la educación siempre son muy por debajo de los que invierten los países industrializados, se ha caído en un círculo vicioso que requiere de ingenio para lograr superar la crisis.

De manera muy lenta se empieza a abrir el acceso a los ingenieros mexicanos en la industria globalizada y poco a poco en campos como los de la informática y las telecomunicaciones se va avanzando.

La ingeniería en la actualidad demanda mayor especialización, gran capacidad para el cambio, actualización permanente, uso de la nuevas tecnologías, ser bilingüe y tener una visión multidisciplinaria.

Los ingenieros mexicanos se han distinguido por su creatividad, ingenio, capacidad y entrega al trabajo, se enfrentan en la época actual a una ingeniería más especializada y con la posibilidad de utilizar más recursos tecnológicos producto de la investigación. En esta ingeniería participan profesionales de grandes empresas transnacionales, lo que se han preparado con ayuda de la investigación, la tecnología y la práctica, por lo que la única alternativa que tienen para no quedar fuera del mercado laboral es la preparación de excelencia, el desarrollar la capacidad de la observación para cambiar en lo que sea necesario y la preparación durante toda su vida para no quedar obsoletos seis meses después de haber terminado la escuela.

No hay comentarios:

Publicar un comentario